EL PARAGUAS, EL COMPLEMENTO OLVIDADO
Cuando hablamos de complementos masculinos, siempre pensamos en sombreros, bufandas, pajaritas, relojes, guantes...
Pero nunca nos acordamos del paraguas, uno de los complementos masculinos que desprenden más elegancia y clase en un look masculino.
Su historia se remonta a miles de años y es de lo más diversa. Se tiene entendido que el paraguas fue un invento chino, pero que su uso estaba extendido por la antigua Mesopotamia, Grecia y Roma. A Europa llegó a principios del siglo XVIII, pero en sus comienzos, el uso del paraguas era signo de poca distinción, puesto que aquellas personas que llevaban un paraguas era las que no tenían un carruaje. Fue en los disturbios parisinos de 1.930 cuando el paraguas adquirió un significado político de carácter populista. En Inglaterra, su uso se expandió gracias a un pintoresco personaje de la aristocracia, Jonas Hanwey quien, a pesar de los insultos y miradas reprobatorias de los más conservadores, lo paseaba como si nada por las calles inglesas después de haberlo descubierto en Rusia.
A España llegó después de la ocupación de México, cuando los conquistadores españoles vieron a los "nobles" aztecas con este objeto.
Desde entonces y hasta nuestros días, el uso del paraguas a sufrido un sinfín de idas y venidas, aunque los más entendidos en este tema siempre han remarcado la elegancia y distinción que desprende el uso de un paraguas en un hombre.
En cuanto a los modelos de paraguas, podemos encontrarnos con un amplísimo abanico de posibilidades. De esta forma existen paraguas lisos, de cuadros, líneas, estampados y multitud de colores y formas. Así como con mangos de muy diversas formas y materiales.
Al igual que en los demás campos existen referentes, la casa Swaine Adeney Brigg es el icono para los entendidos en paraguas. Esta casa fabrica paraguas desde hace más de 250 años y entre su distinguida clientela se encuentra la Casa Real Británica, que desde Jorge III, Jorge IV, Guillermo V, Eduardo VII o la Reina Victoria han confiado en esta prestigiosa firma.
No podemos tampoco olvidarnos de la firma James Smith & Son, otro buque insignia en lo que a fabricación de paraguas se refiere. Esta casa, fundada por James Smith en 1.830, lleva más de 180 años fabricando paraguas de forma artesanal, destacando los singulares y laboriosos mangos de estos complementos.
Por todo ello y para desprender elegancia y saber estar, por lo que no debemos dejarnos en casa este complemento tan particular. Y menos aun con las trombas de agua que están cayendo en estos días. Por eso, si quieres quieres ser un auténtico gentleman coge tu paraguas antes de salir de casa.
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Propias.
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